jueves, 4 de octubre de 2007

Ahorra energía, anda


Anda derecho, en realidad.

Las causas del paso de cuatro patas a dos en la evolución de los homínidos pueden haber tenido un origen ahorrativo. Un estudio de varios investigadores estadounidenses acaba de descrubir que la posición erguida supone un 17% menos de gasto energético que el desplazamiento con apoyo en las cuatro extremidades. Además, utilizar solo las piernas nos permite quemar un 75% menos de calorías. Estos datos se obtuvieron comparando el redimiento de cinco chimpancés y cuatro humanos mientras caminaban sobre una cinta de entrenamiento. Con esta información en la mano, los científicos examinaron fósiles de los primeros homínidos y comprobaron que las variaciones en la anatomía de la cadera y las extremidades traseras dieron lugar a distintos estilos para caminar. Teniendo en cuenta que hace entre 8 y 10 millones de años los cambios climáticos provocaron una persistente escasez de alimentos, es probable que nuestros antepasados tuvieran que recorrer grandes distancias para encontrar algo con que alimentarse. En esas circunstancias, la evolución habría primado la forma de desplazamiento que necesitara menos recursos: la posición erecta, se fue imponiendo hasta llegar al Homo sapiens.

2 comentarios:

Fulgencio Murcia dijo...

Muy interesante Paloma! Enhorabuena! El comentario está muy bien y me encanta la imagen ( ¿a qué mente brillante se le habrá ocurrido incluirla?) ;-)

M@Ria dijo...

Paloma (exa a volar, jejej)
yo también te felicito, tu desarrollo sobre lo que parece ser las ventajas que tiene caminar, esta muy bien y es interesante.